Me encantaría que visitaras también mi otro Blog; un espacio donde dejo mis fotografías; "EL MUNDO SE EQUIVOCA" (http://sequivoca.blogspot.com)
"HAY PERSONAS QUE MARCAN UN ANTES Y UN DESPUÉS, CONVIRTIENDO EN UN REGALO EL AHORA (Luis Bueno) - julio, 2020


lunes, 31 de diciembre de 2018

SHALLOW - Una canción para terminar el año





Desde que vi la película tengo en bucle esta canción. Lady Gaga es una diosa y aquí se sale. Tremenda.
Despedirse con un buen sabor de boca musical es siempre positivo cuando estos meses atrás han dejado su mala semilla. Ojalá vayamos a mejor, todos, siempre.

Salud para todos

domingo, 30 de diciembre de 2018

Viejas costumbres

     Como viene siendo tradicional, me gusta cerrar el año del blog con una canción y abrir el nuevo con otra canción. No tienen que ser canciones de estos 12 últimos meses, simplemente pueden ser evocadoras de momentos vividos, o que hayan sido redescubiertas después de mucho tiempo. Os invito a pensar.

                   ¿Con qué canción despedirías el año?

                                            ¿Con qué canción comenzarías el año?

      A darle vueltas al coco que quedan pocas horas.

     Salud para todos.

martes, 25 de diciembre de 2018

Peticiones del oyente

     Como decía Ismael Serrano "últimamente ando algo perdido, me han vencido viejo fantasmas, nuevas rutinas" y ando flojo de inspiración para crear. Por eso os estoy pidiendo que me echéis un cable. Si alguien tiene alguna historia escondida, algún recuerdo, algún sentimiento, incluso algún secreto al que desee darle una mano de chapa y pintura, que me lo pase. Yo intentaré convertirlo en narración, a mi manera y sin pretensiones, para así poder liberar de las cadenas a los presos que tengamos en la memoria.
 
     Yo, a cambio, ofrezco confidencialidad y la máxima premura que el día a día me deje. No diré quién me da su idea, ni siquiera sabréis qué narración es original y cuál surge de un "encargo" (salvo que el interesado me lo pida).
 
     Es más, si queréis, puedo intentar acompañarlo con una foto a vuestro gusto. ¡¡¡Y AÚN HAY MÁS!!!, me lanzo e intentaré que esa imagen que buscáis salga de mi propia cámara.
 
     Yo no sé a vosotros, pero a mí me parece un reto que puede resultar divertido.
 
     Abiertas quedan las peticiones del oyente.
 
     Salud para todos.

jueves, 20 de diciembre de 2018

Eres importante

            “Dirás que es una tontería, pero últimamente me ha dado por pensar que nos creemos demasiado importantes cuando en realidad somos insignificantes como hormigas. Podemos ser los más trascendentales del país, del planeta o de la Historia pero el día que nos morimos… desaparecemos y punto.” Me miraba con la expresión del que no está siendo tomado demasiado en serio pero al que tampoco le importa demasiado. Sentada y relajada, con los pies calentitos por la estufa que duerme bajo la mesa camilla, prosiguió con su improvisado  jeroglífico.

            - ¿No has pensado nunca eso? Sé que todo el mundo ha pensado en esto pero alguna vez se torna una realidad dolorosa.

            - ¿El qué, que no somos nadie?

            - Eso es, que no somos nadie.

            Un leve cambio de postura dejando caer ligeramente los hombros hacia adelante para tomar aire y continuar. Ves en las noticias que han muerto doscientas personas en una catástrofe en China, por ejemplo, ¿y? Pues que ya no están. Ayer serían muy importantes en sus vidas particulares pero hoy ya no están. No somos nadie y a la vez lo somos todo.

            Yo asentía con la cabeza y ella colocó la suya en una pose que me invitaba a aprobar o tirar por tierra su reflexión. Yo callé.

            Quise decirle lo importante que era ella. Quise contarle los miedos que la Señora Muerte estaba filtrando entre mis sueños en las últimas madrugadas. Quise bromear y repetir ecolálicamente “no somos nadie, no somos nadie, no somos nadie”. Quise decirle que no quiero perderla jamás porque me costaría imaginarme este cuadro semifamiliar que nos hemos montado sin su presencia.

            Pero no pude.

            - Eres muy importante, lo sabes. –alcancé a decir

            - Para mucha gente –mirando a no sé dónde.

            - Para mucha gente.

            Y cogí su mano.

martes, 11 de diciembre de 2018

Pecado original

               Fue después del tercer café cuando empecé a sentir que mi cuerpo volvía a formar parte de la tierra de los vivos. Otra noche sin dormir, no más de siete grados en la calle, aceras anegadas de escarcha y mis pocas ganas de trabajar me parecían pocas excusas para permanecer aletargado unas horas más bajo el edredón. Los lunes siempre fueron un mal día desde el mismo momento de la Creación del universo. Ahí Dios no pensó eso de que “era bueno”, no tenía argumentos para defender la belleza de algo que le había salido mal hasta en el orden semanal. Él también tuvo que salir de su funda estelar esa mañana y ponerse a la tarea; que si el cielo y la tierra, que si los planetas, que si los animalitos, que si Adán y Eva. A veces pienso que se tenía que haber dejado de tanto lío y haberse quedado bien cómodo, en su eterna poltrona sideral, rodeado de la nada más absoluta. 
 
               Eso sí que habría sido un placer.
 
               La mañana avanzó como la de cualquier lunes antes de la siesta, con vaivenes mentales y problemas de difícil solución. Sólo los cerebros privilegiados podrían hallar remedios a las complicaciones matutinas, pero cerebros de esos no solían rondarme.
               Dudas y escaleras, escaleras y dudas; toda la mañana así.             
               Sólo me salvaba del inicio de la semana el recuerdo del final de aquella anterior cuando, tumbada en el sofá del salón, te pedí que no te cubrieses con ningún cojín, que yo prefería seguir mirando el efecto que el frío causaba en cada espacio de tu piel, que se iba erizando cuanto más me fijaba en ella. Me parecías el más original de los pecados que se podían cometer en esta o en cualquier otra vida y por nada del mundo quería poner fin a un momento tan único.
               Alargamos tanto la noche que hubiese invertido toda mi penitencia en tapar el sol con mis propias manos con tal de que tú siguieses frente a mí, tumbada y mirándome con los mismos ojos que la serpiente (la que Dios colocó en el Edén) le pondría a los insensatos primeros humanos para hacerlos pagar por siempre su desliz. No te cubras –te pedí. Y separaste el cojín de tu pecho dejándolo caer para que yo recuperase la fe y diese gracias al Creador por no haber sido un gandul en el primer día de la primera semana de la Historia.
               Y así fue como sobreviví ese lunes y todos los lunes siguientes. Pensando que merecía la pena sonreír entre dudas y escaleras, escaleras y dudas, aunque mis dosis de cafeína me expulsaran para siempre del Paraíso del descanso nocturno.
(Imagen encontrada en algún lugar de la red que no recuerdo)