Cuando el camino se hace pesado hay que aliviar peso y estoy planteándome, seriamente, eliminar el término “deprisa” de mi vocabulario.
El experimento piloto consistirá en saber cuántos días seré capaz de vivir sin mi reloj en la muñeca.
¿Apuestas?
Confío, yo lo conseguí cuando se me rompió el reloj y no tuve más remedio que trabajar sin él! Al final uno se acostumbra y hasta se despierta sin despertador!!!
ResponderEliminar(pero he vuelto a llevar reloj, entono el mea culpa)
ya llevas un día!! Prometo no preguntarte la hora como he hecho hoy... no lo sabía :D
ResponderEliminarY bien?
ResponderEliminarya ha pasado un mes.
Te lo has vuelto a poner?
Tic-tac-tic-tac...
Sí?
:(
No?
:)
Bueno.... duré solo una semana sin él, pero, aunque no te lo creas, fue una tremenda terapia. Me ha ayudado a relajarme bastante. parece increíble, pero es verdad.
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