Aquella noche conocí a Patri (Aire) y me “ganó”. Estábamos en el mismo local, en el concierto de Curro (a ver si se anima ya y empieza a cantar por ahí) y de Fran Fernández, al cual también conocí en ese momento. Este, hizo un comentario que a Patri y a mí nos encantó. Vino a decir que, puede haber muchos roces entre dos personas, pero “lo que se lava se estrena” y nos olvidamos de esos roces con facilidad. Rozarse, al fin y al cabo, no tiene ningún misterio, ni ninguna transcendencia, pero los besos… Cuando dos bocas se besan, si existe “algo” entre ellas, por mucho tiempo que pase, ya no se podrán desbesar.
Y hablamos sobre aquello, y comenté que mi teoría también era esa. Para mí siempre ha sido mucho más importante un beso que cualquier otro tipo de “roce”, sea el que sea. Olvidar lo que pasó algún día, en algún lugar, con alguna persona, será fácil. Pero, si en ese preciso instante, surgió la necesidad de besarse, ese momento será imposible de olvidar. Creo que no me explico bien, pero sé que me entenderéis.
Con permiso de la autora (aunque no se lo haya pedido, en realidad) dejo esta maravilla que dejó ella en su blog.
desbésame continuamente
hasta que mi boca
sea incapaz de recordarme
tus caminos
-quiero perderme
en tu olvido una vez más,
no acostumbrarme-.
coincidencias de la vida, volvía de la playa tarareando "sólo una más, yo pago" y acordándome de esa noche y preguntándome por ti
ResponderEliminaray, desbesarse, desbesarse... ¡desbesarme!
:)
(si digo tonterías es culpa de Fran que sigue sonando y del sol)
muak!
y yo que me quede con todas las ganas de ir al concierto...
ResponderEliminarUn beso es demasiado importante... mi me chocó la teoría de Vivian (pretty woman), pero al cabo del tiempo terminé por darle la razón...
saludos perdidos!