Lágrimas de San Lorenzo esta noche, lluvia de estrellas fugaces para que, entre bostezo y bostezo, los más devotos pidan sus deseos; como si el paso de una bola perdida en el espacio más lejano pudiese mover los hilos de una vida.
A ti, que todo te sonríe hoy, que tu vida es un cúmulo de alegrías y un futuro esperanzador. A ti, que te sientes tocar el cielo cuando antes no veías la salida del pozo, que sonríes sin motivo y no recuerdas qué es la pena; a ti, te dejo mi recado: Pide tú los deseos por mí.
en esta noche siempre recuerdo a mi prima Marina, estábamos en el campo de mis abuelos, tumbadas en la hamaca de la piscina, en la oscuridad de la noche esperando a ver las estrellas más increíbles... jamás había visto una estrella fugaz así, siempre había visto puntitos luminosos que de pronto parece que se mueven y desaparecen, pero aquellas estrellas magníficas me cortaron el aliento.
ResponderEliminar"Corre, Marina, pide un deseo", le dije emocionada porque supuse que era la primera vez que ella veía algo tan increíble como aquello.
Elevó su voz con la ilusión y la inocencia más inaudita: "que mañana cuando nos despertemos esté todo lleno de nieve"...
Para una vez que podía haber hecho soñar a Marina, me pidió algo tan imposible...
buenas noches!!! yo deseo por ti, si es que se me cruza algún lucero
Ese santo anda todo despistado, así que si conoces a alguien a quien le haga caso, dile también que pida los deseos por mi, que no hago más que desperdiciar luceros.
ResponderEliminarAire...hermoso! Sin palabras...
AIRE, siempre hermoso...
ResponderEliminarHARES, a mi me hace poco caso, será que mi trato hacia él es el de alguien con los pies en la tierra, no crío pájaros en la cabeza. Un saludo!!
Me pasa igual...como sea, ya no desperdiciaré más luceros.
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